Por: Ana Fondo

 

Ginebra, 24 de noviembre.- Cada año, miles de personas en busca de una nueva oportunidad de vida intentan cruzar la frontera terrestre que separa a Latinoamérica de Estados Unidos. El documental Llévate mis amores narra la historia de las Patronas, un grupo de mujeres que desde hace 20 años provee alimento a los migrantes que transitan por México en el tren conocido como la Bestia.

El documental, dirigido por el mexicano Arturo González Villaseñor, hace parte de la muestra de la decimoséptima edición del Festival FILMAR en América Latina, que se celebra del 13 al 29 de noviembre en Ginebra, Suiza.

Durante 90 minutos, la película plasma la labor de estas mujeres de la comunidad La Patrona, ubicada en la localidad de Guadalupe, Veracruz, quienes, sin recibir nada a cambio, preparan diariamente entre 15 y 20 kilos de arroz y fríjoles que posteriormente llevan en bolsas junto con botellas de agua, que ellas mismas llenan, a las vías férreas donde se disponen a lanzarlas al tren en marcha.

A bordo de la Bestia, los migrantes se esfuerzan por recibir la comida. En el intento, muchos caen del convoy e intentan volver a subir, a pesar de que el tren puede ir a más de 40 kilómetros por hora. Cuando esto ocurre, las Patronas tratan de convencerlos de no subir al aparato en marcha por el peligro que representa: muchos han sufrido accidentes al intentar montar al tren una y otra vez para no perder la oportunidad de llegar a Estados Unidos, y las Patronas lo saben.

En el documental, varias de ellas narran sus experiencias con migrantes jóvenes que han sido arrollados o aplastados por el tren y han perdido sus extremidades. Además, luego de accidentarse no es asunto sencillo conseguir atención médica ya que muchos hospitales se niegan a recibirlos o les ponen impedimentos si no tienen dinero para costear los tratamientos.

La violación de los derechos humanos de los migrantes en tránsito por México ha sido un tema de preocupación para diversos organismos internacionales. En febrero pasado, el Comité contra la Desaparición Forzada recomendó de manera prioritaria al Estado mexicano garantizar “la protección de los migrantes contra la desaparición a través del establecimiento de un mecanismo transnacional de justicia”.

Por su parte, el Alto Comisionado para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, recordó en junio ante el Consejo de Derechos Humanos que el presidente norteamericano, Barak Obama, consideraba el paso de niños migrantes no acompañados por la frontera de México como una crisis humanitaria.

Adicionalmente, en el marco de su vigesimonovena sesión, el mismo organismo de la ONU aprobó por consenso dos resoluciones que buscan garantizar la protección de los derechos de todos los migrantes en tránsito en el mundo y que fueron impulsadas, entre otros Estados, por México, Perú y Honduras.

Una delegación de organizaciones de este último país visitó Ginebra, en septiembre pasado, para dar a conocer en Naciones Unidas los principales hallazgos de una misión de verificación llevada a cabo para analizar en profundidad las causas y efectos de la migración hondureña. Este es el reportaje con el que lo documentó Panorama.