Por: Gabriela Sotomayor

 

Ginebra, 15 de octubre.- “El caso de Ayotzinapa es el último y el más grave ejemplo de la violencia desbordada que hay en el país”, expresó en entrevista con Panorama Diplomático Alejandra Ancheita, abogada mexicana, quien recientemente fue galardonada con el Premio Martin Ennals 2014, considerado como el Nobel de los Derechos Humanos.

Ancheita, fundadora y directora ejecutiva de ProDESC, lleva más de 15 años colaborando con migrantes, trabajadores y comunidades indígenas para proteger sus derechos y sus tierras  frente al gobierno, empresas mineras y energéticas transnacionales.

Con respecto al galardón que recibió de manos del Alto Comisionado de Naciones Unidas para Derechos Humanos Zeid Ra’ad Al Husein en una ceremonia celebrada en Ginebra, Ancheita reconoció que «es un honor, pero también es una muestra sobre la situación tan grave que se está viviendo en el país».

Ser ganadora de este premio «es una responsabilidad muy grande porque implica tener una voz en diferentes espacios, principalmente en el internacional, donde se puede denunciar más abiertamente la situación que diferentes colectivos sufren», agregó.

El Martin Ennals lo conceden cada año diez organizaciones no gubernamentales con reconocido prestigio internacional como Amnistía Internacional, Human Rights Watch, la Federación Internacional de Derechos Humanos y la Organización Mundial contra la Tortura, entre otras.

Asimismo, Ancheita subrayó que el haber sido seleccionada «muestra la situación a la que nos enfrentamos los activistas, dado el altísimo riesgo que significa ser un defensor de derechos humanos en México».

La defensora mexicana fue seleccionada entre otros activistas como la china Cao Shunli, quien murió el 14 de marzo bajo custodia de las autoridades de su país después de negársele atención médica y Adilur Rahman Khan quien ha denunciado detenciones ilegales, desapariciones forzadas y ejecuciones extrajudiciales en Bangladesh.

El premio responde a una investigación muy importante que hicieron las diez organizaciones que lo otorgan, explicó la abogada mexicana, y además el Martin Ennals «confirma mi calidad como defensora de derechos humanos».

Consideró que este galardón «es una clara respuesta a la campaña de difamación de la que he sido sujeto en en el país (…) pues he sido víctima de ataques a veces de manera pública y otras veces con métodos más sofisticados».

Por su parte, Michael Khambatta, director del Premio Martin Ennals, dijo a Panorama Diplomático que «Ancheita y ProDESC se han visto sometidos a extrema vigilancia y han sido víctimas de una campaña de difamación en los medios de comunicación nacionales además de sufrir un asalto a sus oficinas».

Kambatha subrayó que uno de los objetivos principales de la distinción de recibir el premio, «es ofrecer protección a los laureados mediante el reconocimiento internacional». Explicó que el premio recompensa a defensores de derechos humanos que han mostrado un fuerte compromiso y se han expuesto a situaciones de gran riesgo, el cual es avalado por las principales organizaciones no gubernamentales internacionales que documentan serias violaciones en el mundo.» En México hay un patrón claro de ataques, amenazas, criminalización y asesinatos de defensores de derechos humanos», afirmó Khambata.