Bachelet sobre masacre de Tacueyó: “La respuesta no puede ser solo la militarización”
Su despacho llamó a Colombia a “romper el círculo de la impunidad” contra los pueblos indígenas y a brindarles urgentemente protección en todo el país.
La Oficina de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos (ACNUDH) lamentó este viernes el asesinato de cinco indígenas del pueblo nasa ocurrido el pasado martes en Tacueyó, norte del Cauca, y pidió a las autoridades “establecer una investigación pronta, exhaustiva, independiente e imparcial, que incluya las posibles omisiones de las autoridades que podrían haber permitido la masacre”.
A través de su portavoz en Ginebra, Marta Hurtado, la ACNUDH llamó al Gobierno a “romper el círculo de impunidad con respecto a las amenazas, acoso y asesinatos de los que son víctimas los pueblos indígenas”.
La masacre tuvo lugar el 29 de octubre en inmediaciones de la vereda La Luz, donde hombres armados atacaron la camioneta en la que se movilizaban la gobernadora Cristina Bautista y algunos miembros de la Guardia Indígena. Además de la gobernadora fueron asesinados José Gerardo Soto, Asdrúval Cayapú, Eliodoro Inscué y James Wilfredo Soto. Otros seis guardias resultaron heridos.
“Pedimos al Gobierno responder a esta dramática situación de manera integral y concertada, y no simplemente a través del aumento de la presencia militar”, dijo a la prensa la portavoz de la oficina dirigida por Michelle Bachelet.
De igual manera, recordó que en 2017 la gobernadora asesinada había sido becaria de un programa de formación establecido por la ACNUDH y que actualmente disfrutaba de otra beca del Fondo de la ONU para los Pueblos Indígenas. “Era una mujer inspiradora, profundamente comprometida con la defensa de los derechos humanos de los pueblos indígenas”, afirmó.
Adicionalmente, señaló que solo en 2019 la oficina de la ACNUDH en Colombia, cuyo mandato fue renovado por tres años más el pasado miércoles, ha documentado 52 homicidios en territorio del pueblo nasa, 74 amenazas en contra de miembros de la comunidad y nueve ataques violentos en su contra.
“El pueblo nasa ha alertado repetidamente a las autoridades acerca de las amenazas contra su seguridad”, dijo Hurtado antes de insistir en la “necesidad urgente de tomar medidas efectivas de prevención y protección para los pueblos indígenas en todo el país”, en particular en el norte del Cauca, “en línea con su derecho a la tierra y a la autodeterminación, tal como fueron reconocidos en la Declaración de la ONU sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas”.
“Le recordamos al Gobierno que cualquier medida de prevención o protección que pueda afectar a los pueblos indígenas debe ser concertada con sus autoridades, en pleno acuerdo con sus tradiciones, prácticas, autonomía y jurisdicción”, concluyó la vocera de la ACNUDH.
El pronunciamiento de la oficina de Bachelet ocurre horas después de que tres relatores especiales de la ONU repudiaran la masacre y pidieran a las autoridades tomar medidas urgentes para proteger a los pueblos indígenas del norte del Cauca.
“Este no es un evento aislado. Las comunidades y pueblos indígenas del Cauca están sufriendo una violencia incesante e inaceptable. La situación está empeorando a pesar de los repetidos llamamientos para abordarla”, dijeron en un comunicado conjunto los expertos de la ONU en materia de defensores de derechos humanos, ejecuciones extrajudiciales y derechos de los pueblos indígenas.
Adicionalmente, pidieron al Gobierno adoptar “medidas urgentes, en el marco del cumplimiento de los Acuerdos de Paz, para poner fin a estos mortíferos ataques”.