Naciones Unidas instó a todos los Estados a eliminar la mortalidad materna prevenible
El Consejo de Derechos Humanos adoptó una resolución en la que urge a los Estados a luchar contra la mortalidad materna y a garantizar a las mujeres el ejercicio de sus derechos sexuales y reproductivos.
El Consejo de Derechos Humanos de la ONU adoptó hoy por consenso una resolución en la que pide a todos los Estados “renovar su compromiso político de eliminar la mortalidad y morbilidad prevenibles asociadas a la maternidad”. Así mismo, los invita a “redoblar esfuerzos para eliminar todas las barreras al acceso a las instalaciones, servicios, productos e información en materia de salud sexual y reproductiva”.
En ese sentido, la resolución insta a las autoridades a adoptar medidas “para asegurarse de que las leyes, políticas y prácticas respeten la igualdad del derecho de la mujer a decidir de manera autónoma en los asuntos relativos a su vida y su salud, revocando las leyes discriminatorias y luchando contra los estereotipos por razón de género y las conductas que las discriminan”.
Para lograr erradicar la mortalidad materna, el Consejo solicita a los Estados asignar recursos y personal suficientes a los sistemas de salud y reforzar la cooperación técnica “mediante la transferencia de conocimientos de expertos, tecnología y datos científicos e intercambiando buenas prácticas con países en desarrollo” y abordar “los efectos de la discriminación contra la mujer en la mortalidad y morbilidad asociadas a la maternidad”.
En su resolución, el Consejo resalta la necesidad de hacer frente a las causas profundas de la mortalidad materna “como la falta de servicios de salud accesibles, asequibles y adecuados, la pobreza, todos los tipos de malnutrición, los matrimonios precoces y forzosos, la mutilación genital femenina, la procreación prematura, las desigualdades entre los géneros y todas las formas de discriminación y violencia contra la mujer”.
La unanimidad en la adopción de la resolución tuvo, sin embargo, un costo significativo. Una de las cinco enmiendas propuestas por Rusia, todas aceptadas en votaciones individuales, despojó al texto original de uno de sus puntos más progresistas: la invocación de dos recientes observaciones generales del Comité de Derechos Económicos, Sociales y Culturales y del Comité de Personas con Discapacidad relativas, respectivamente, al derecho a la salud sexual y reproductiva, y a las mujeres y niñas con discapacidad.
No obstante, los llamamientos que hace el Consejo en virtud de esta resolución son de vital importancia para la promoción y fortalecimiento de los derechos de las mujeres. Además de los ya mencionados, el Consejo exhortó a los Estados a cerciorarse de que los indicadores que empleen se adapten a los estándares internacionales en derechos humanos, a garantizar el acceso de las mujeres y las niñas a la justicia y a asegurar su participación en todas las decisiones que las afecten.
Finalmente, la resolución solicita a la Oficina del Alto Comisionado para los Derechos Humanos preparar un informe de seguimiento “sobre buenas prácticas y retos en la aplicación de un enfoque, basado en derechos humanos, de la eliminación de la mortalidad y morbilidad prevenibles asociadas a la maternidad”. Este informe será discutido en la 39.ª sesión del Consejo, que tendrá lugar en septiembre de 2018.
