Por: Juan Gasparini

 

Ginebra, 6 de marzo.- El Grupo de Trabajo de la ONU sobre Detención Arbitraria hizo un “llamamiento urgente” a la Argentina por Milagro Sala, dirigente de la organización barrial de la Provincia de Jujuy, Tupac Amaru, detenida desde el pasado 16 de enero. El Grupo se pronunció acogiendo la denuncia de varias organizaciones de la sociedad civil argentinas, confirmó este viernes a la Agencia France Presse (AFP) una fuente de Naciones Unidas en Ginebra.

Los denunciantes alegan que la detenida sufriría “una irreparable afectación del derecho a la libertad de expresión y a la protesta social”, una “utilización política y extorsiva” debido a la oposición “a la implementación de una norma o de una resolución de gobierno”, y le reprochan a la Argentina incumplimiento de un juicio justo e imparcial, irregularidades del proceso penal, afectación del debido proceso, y violación de la presunción de inocencia y de la libertad personal.

Inicialmente acusada judicialmente de instigar a cometer delitos de sedición, supuestamente por organizar una protesta (un acampe de manifestantes) en la Plaza Belgrano de Jujuy que habría entorpecido la circulación, Milagro Sala fue detenida, pero luego liberada, para ser inmediatamente acusada de los delitos de “defraudación en perjuicio del Estado, extorsión y asociación ilícita”, por los cuales continúa detenida, revela la noticia difundida por la AFP.

Los denunciantes indican que Milagro Sala fue elegida para Parlasur, el parlamento del Mercado Común del Sur, lo que le daría inmunidades “de arresto y expresión, de las que gozan los diputados en la República Argentina”, un “hecho que ha sido desconocido por la justicia”, y en ese contexto agregan que el Parlamento Europeo envió una carta al presidente argentino, Mauricio Macri, exigiendo su liberación.

El Grupo de Trabajo de la ONU sobre la Detención Arbitraria está compuesto por cinco expertos independientes, elegidos por el Consejo de Derechos Humanos, y quienes trabajan sin cobrar sueldo pues solo se les costean viáticos.

El llamamiento urgente cursado a la Argentina invita al gobierno del presidente Macri a tomar posición sobre el caso: liberar a la detenida o justificar su oposición por escrito, eventualidad que motivaría a estos expertos a resolver definitivamente. Una decisión que, como la tomada recientemente por ellos mismos en beneficio de Julian Assange, el director de WikiLeaks refugiado en la embajada de Ecuador en Londres, no sería vinculante.