Por: Ines Carel

 

Ginebra, 2 de julio – El Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad Al Hussein, presentó ayer ante el Consejo de Derechos Humanos su informe sobre el impacto de las acciones del grupo terrorista Boko Haram. Zeid afirmó que este grupo ha puesto en práctica un “patrón de ataques viciosos e indiscriminados desde meses, inclusos años”.

Varios Estados reaccionaron ante la intervención. España, por ejemplo, lamentó la “intensificación de la violencia desde la elección del presidente Buhari”, el cual fue electo el 29 de mayo pasado en Nigeria.

En este sentido, la delegación española lo animó a “avanzar en la puesta en práctica de sus declaraciones relativas a la promoción del Estado de derecho y a la garantía de la justicia y la promoción de los derechos humanos en la lucha contra el terrorismo, incluso mediante la revisión de códigos de conducta militares para asegurar el respeto de los derechos humanos en las operaciones antiterroristas”.

Al respecto de los métodos criminales del grupo en el noreste de Nigeria, Ecuador expresó “especial indignación por la utilización de niños y niñas para efectuar ataques suicidas” así como hacia los “matrimonios forzados, violencia sexual, reclutamiento forzado, esclavitud, destrucción de infraestructuras”. También condenó “el secuestro de inocentes, en particular de mujeres y menores de Edad”.

La delegación ecuatoriana saludó el papel del Estado nigeriano, como de otros países de la región en la “liberación de aproximadamente 700 mujeres y niñas secuestradas por dicho grupo en los pasados meses”. Asimismio, llamó a la “comunidad internacional para aunar esfuerzos en la dotación de la asistencia humanitaria” al Gobierno nigeriano para ayudar a las víctimas, en especial “al más de un millón de refugiados y desplazados nigerianos”.

Por su parte, Venezuela condenó “al terrorismo en todas sus formas y en cualquier lugar del mundo”, urgió a que la crisis provocada por Boko Haram sea “categóricamente condenada por la comunidad de las naciones”, y llamó a la promoción de “un plan de paz que ponga fin a los actos terroristas” además de “incentivar el apoyo, la asistencia, y la solidaridad internacional con los países afectados”.

Después de haber viajado al norte de Camerún, al sur de Níger y al noreste de Nigeria, la oficina del ACNUDH continuará examinando la situación durante las próximas semanas, ahora en Chad. El informe completo será presentado ante el Consejo en su sesión de septiembre.