Ginebra 17 Septiembre. – Expertos convocados por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU solicitaron a los Estados, en el marco de un panel de discusión celebrado en Ginebra, integrar la perspectiva de género en sus instituciones, políticas y planes de acción, con el objetivo de garantizar el disfrute de los derechos humanos de las mujeres; al mismo tiempo, demandaron mayores esfuerzos para que las distintas agencias, órganos y mecanismos de la ONU, entre ellos los procedimientos especiales, integren esta perspectiva en sus trabajos.
Jane Connors, responsable de la ONU sobre Investigación y Derecho al Desarrollo, aclaró que “la perspectiva de género no se limita a lo que se cree como violencia contra la mujer” y explicó que “se refiere a identidades y atributos construidos socialmente que deben garantizar una igualdad sustantiva”.
Así mismo, la experta recalcó la importancia de “acabar con los estereotipos de género nocivos”. La Oficina del Alto Comisionado de Derechos Humanos había advertido, en un informe presentado hace dos semanas, que los estereotipos asignan atributos culturales que subordinan a las mujeres, como la idea de que deben estar disponibles a sus maridos, la preeminencia a asumir labores domésticas y su incapacidad de ascender laboralmente por no ser aptas para tomar decisiones importantes.
Dichos estereotipos “suponen obstáculos para gozar de sus derechos y a menudo esconden violaciones en su derecho a la salud sexual y reproductiva”, afirma el informe. También señala la lentitud en los avances para garantizar la igualdad en la participación política de las mujeres y cita al Comité para la Eliminación de la Discriminación contra las Mujer, que ha afirmado que “no puede llamarse democrática a una sociedad en la que la mujer está excluida de la vida pública y del proceso de adopción de decisiones”.
La viceministra del Servicio Nacional Chileno para Niños, Gloria Vargas, quien presidió el debate, abordó entre otros aspectos la vulnerabilidad de los derechos de las mujeres en casos de conflictos armados y desastres naturales, situaciones en que “se exacerban las violaciones y el uso de violencia sexual en niñas alcanza dimensiones impensables”. Por lo cual pidió la inclusión de la perspectiva de género en operativos de despliegue de ayuda para catástrofes naturales.
A su vez, Bineta Diop, enviada especial de la Unión Africana para debatir en Ginebra, señaló que “las mujeres africanas han sido las más afectadas y han debido pagar con sus cuerpos”, al recordar el brote de violencia sucedido en Guinea en 2009, donde se reportó 109 casos de mujeres sometidas a violación sexual. Sin embargo, destacó la rápida acción de la ONU para evitar una mayor escalada de violencia y garantizar la visibilidad de las víctimas.
Por su parte, el Relator Especial para los derechos humanos en Irán, Ahmed Shaheed, indicó la dificultad de implementar la perspectiva de género en los países de Medio Oriente, especialmente donde predominan los valores islámicos. Para el relator, “las normas de género pueden convertirse en una amenaza a la cultura aferrada a la religión en dichos países”, y los Estados limitan sus obligaciones para minimizar los derechos de la mujer.
El debate generó la intervención de países latinoamericanos. Costa Rica, en nombre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC), afirmó que “se deben tener en cuenta elementos que coadyuven al empoderamiento de la mujer” y enfatizó la vulnerabilidad que sufren en América Latina “las niñas, mujeres migrantes, rurales, indígenas y afrodescendientes, desplazadas y con discapacidades”. A su turno Venezuela apoyó “la participación de movimientos sociales y el establecimiento de espacios multilaterales sobre los derechos de la mujer como ONU-Mujer”.
Este panel de discusión se llevó a cabo el pasado lunes en el Palacio de Naciones Unidas de Ginebra con motivo de la 27 sesión del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, donde diplomáticos, expertos y representantes de organizaciones de la sociedad civil se reúnen hasta el 26 de septiembre para discutir temáticas concernientes a la promoción y defensa de los derechos humanos.