Por: Juan Gasparini

 

Ginebra, 28 de agosto.- El Comité de la ONU contra la Discriminación Racial pidió que “miembros de los pueblos indígenas y afrocolombianos, incluyendo mujeres, sean consultados apropiadamente en las negociaciones de paz” que se desarrollan en Cuba entre el gobierno del presidente Juan Manuel Santos y las FARC, en un dictamen publicado este viernes en Ginebra.

A este Comité le preocupa que “las negociaciones de paz carezcan de la efectiva participación de los pueblos indígenas y de la población afrodescendiente” y que “el conflicto armado [los] siga afectando desproporcionadamente”, debido “a la militarización de sus territorios, la alta incidencia de la violencia sexual (…), la utilización de niños (…) por grupos armados no estatales (…) y las ejecuciones extrajudiciales, (…) inclusive dentro de la práctica conocida como falsos positivos”.

La ONU deploró “las constantes amenazas y violencia que [les] impiden a los pueblos indígenas y afrodescendientes ejercer el goce efectivo de sus derechos tradicionales”, y “la falta de adopción de los reglamentos necesarios (…) y de aplicación” de una ley “que reconoce el derecho de propiedad colectiva sobre sus territorios a los afrocolombianos”, aunque lamentó “que la restitución esté limitada a las víctimas desplazadas de sus tierras después de 1991”.

Los 18 expertos independientes de este Comité criticaron en sus recomendaciones a Colombia el “impacto negativo de los proyectos de explotación de recursos naturales, inclusive la minería ilegal, en los territorios de pueblos indígenas y afrocolombianos, ocasionando daños irreparables en el medio ambiente y afectando sus formas tradicionales de subsistencia y de explotación de la tierra y recursos, tales como la caza, la pesca, la agricultura y la minería ancestral”.

En particular fue citada “la situación que enfrentan los afrocolombianos en el norte del Cauca, el pueblo wayúu en La Guajira, así como los pueblos indígenas en Putumayo y Nariño”. El Comité urgió a Colombia a que “garantice el goce pleno” de los derechos de indígenas y afrocolombianos “sobre las tierras, territorios y recursos naturales que ocupan o usan, frente a actores externos que explotan [esos] recursos legal como ilegalmente”.

A tal efecto la ONU lamentó “la falta de aplicación efectiva” del “derecho a la consulta” de esos pueblos ante planes de explotación de sus tierras, y lamentó “declaraciones realizadas por funcionarios públicos de alto nivel considerando al derecho a la consulta previa un obstáculo para los proyectos de desarrollo e infraestructura”.

El Comité subrayó que prosiguen “las constantes amenazas y los asesinatos de defensores de los derechos humanos y de líderes de pueblos indígenas y afrocolombianos, tal como el asesinato perpetrado contra el líder afrocolombiano Genaro García”, para lo cual exhortó a “una investigación exhaustiva y persecución eficaz contra las personas que atentan contra la vida e integridad física de los defensores de derechos humanos, incluyendo los líderes y defensores de los derechos de los pueblos indígenas”.